Crítica: Zombieland: Tiro de gracia

Por Oscar Andrew

Nombre original: Zombieland: Double Tap

Director: Ruben Fleischer (Venom, 2018).

Duración: 99 minutos (1 hora y 39 minutos).

Distribuidora: Sony Pictures.

Actores: Woody Harrelson, Jesse Eisenberg, Emma Stone, Abigail Breslin, Zoey Deutch, Rosario Dawson, Luke Wilson, Bill Murray, etc.

Luego de 10 años llega la secuela de Zombieland o también conocida como Tierra de zombies (2009), y resulta ser un agradable y entretenido producto sobre zombies que no repara en humor y en sangre.

Ruben Fleischer, quien dirigió Venom el año pasado, se mimetiza con el proyecto nuevamente y plantea la continuación 10 años después de Tallahassee (Woody Harrelson), Columbus (Jesse Eisenberg), Wichita (Emma Stone) y Little Rock (Abigail Breslin) en el mundo conquistado por nuevos tipos de zombies, los cuales lucen más por su cantidad numérica en cada escena, además del maquillaje y la capacidad física de cada uno. La sangre y la violencia crecen de forma que se combinan con dosis aumentadas de humor sostenidas principalmente por Zoey Deutch (¿Por qué él?, 2016) a través de su personaje caricaturesco e irreverente. Asimismo refresca los conceptos impuestos desde la primera película (el contexto, discursos de personajes, etc.).

Por otro lado, que va más allá del entretenimiento y la diversión, la película rompe sus propias reglas mediante incongruencias fuera de la convencionalidad, además abusa de plantear anacronismos en aspectos históricos, modas, marcas comerciales, los cuales no convergen herméticamente con la historia sencilla y predecible.

Para el fin de semana, Zombieland: Tiro de gracia es un material bien ejecutado en términos generales, con decente manufactura técnica y con humor y violencia que logra entretener y sobre todo, gustar.